Las tabletas son las reinas del mercado tecnológico en la actualidad (con permiso de los smartphones). Si no hace mucho tiempo, las tabletas parecían enfocadas al sector profesional, y más o menos al dedicado a la tecnología, hoy todo el mundo puede encontrar una tableta que se adapte a sus gustos, las características técnicas que busca y un precio moderado. También los niños. (Aunque, en este caso, el asunto del precio será cosa de sus padres, claro.)
En fin, que encontramos en el mercado tabletas diseñadas para los más pequeños, como la Playbase Plus. La pregunta que muchos se harán es: ¿qué diferencia una tableta normal de una para niños? Principalmente la resistencia de su pantalla unido a un diseño divertido y un precio más asequible.
Además, ya que no todo es el exterior, hay una diferencia en las aplicaciones que vienen preinstaladas: en esta Playbase Plus se apuesta por juegos y por aplicaciones educativas.
Pero Playbase Plus se diferencia también de otras tabletas diseñadas el público infantil en que tiene un tratamiento antibacterias, para que los pequeños usuarios estén algo más seguros al usar el dispositivo táctil. No es difícil, viendo las características de esta tableta, imaginarse un futuro donde los niños reciban sus clases con una tableta parecida.
En todo caso, esta tableta no tiene nada que envidiar a otras disponibles en el mercado, incluso a las tabletas para adultos. El sistema operativo es un Android 2.3, mientras que cuenta con un procesador de un solo núcleo a 1,2 GHz, 1 GB de RAM y 8 GB de almacenamiento. Más de un adulto la querría para él, ¿no?
La pantalla es de tipo multitouch de un tamaño de 7 pulgadas. Es antiarañazos y tiene una resolución de 800×480. Incluye una cámara frontal de 0,3 megapíxeles (en este punto no destaca precisamente), acelerómetro, ranura para tarjetas micro SD, altavoces estéreo, conexión wifi y una autonomía que dura unas cinco horas. La verdad, bastante completita, sobre todo, si pensamos que es para críos.
En definitiva, unas características técnicas en la media de las tabletas para adultos, pero con detalles diseñados para el mercado infantil. Y todo ello, sólo por unos 275 euros. Algún padre se la quitará a escondidas a su hijo, seguro.