Pues parece que la próxima guerra tecnológica no va a ser por causa de portátiles, móviles o tabletas, sino por el mejor reloj inteligente. Samsung ha ganado la primera batalla aunque sólo sea por anticiparse en la presentación de su modelo. Los rumores, por fin, se han convertido en realidad y la marca surcoreana ha presentado su reloj inteligente, llamado Galaxy Gear.
Se puede llamar reloj porque se coloca en la muñeca. Pero es mucho más, ya que el nuevo dispositivo permite poner en marcha aplicaciones como si fuera un smartphone, así como hablar por teléfono (si el propietario tiene un teléfono de la misma marca), mandar y recibir mensajes SMS o hacer fotos. Un teléfono inteligente en la muñeca que haría las delicias del Superagente 86.
El Galaxy Gear tiene una pantalla AMOLED de 1,63 pulgadas y 320×320 píxeles, un procesador de 800 MHz y una cámara de 1,9 megapíxeles que permite la grabación de vídeo en H264 o Mp4, a 720p. Además, cuenta con acelerómetro, 4 GB de memoria, 512 de memoria RAM y dos micrófonos para reducir el ruido ambiental.
La principal innovación es que el usuario podrá emitir órdenes a través de su voz y hablar siempre que el teléfono Samsung sea compatible. Se me viene a la cabeza cuando el protagonista de El coche fantástico, Michael Knight, hablaba con su coche, Kit.
Aplicaciones compatibles
En cuanto a las aplicaciones compatibles, de momento, hay más de sesenta. Pero lógicamente, irán apareciendo más con el paso del tiempo. Entre otras, se pueden usar Evernote, Pocket o Runkeeper. Una de las apps en la que están trabajando los desarrolladores de Samsung es Find My Phone, para encontrar los teléfonos vinculados al reloj a través de Bluetooth.
El reloj inteligente Galaxy Gear se empezará a vender en Estados Unidos a partir de octubre por 299 dólares. Ideal para los que no pueden vivir sin lo último en tecnología y para los que se quieran sentir como un agente secreto.