El fabricante de aviones Boeing ha desarrollado un teléfono que se autodestruye. El terminal está enfocado sobre todo a personas que trabajen en los cuerpos de seguridad del estado. Con este tipo de dispositivos se les garantiza el acceso de la forma más segura posible a cualquier dato que necesiten. Boeing Black, así se llama el smartphone, surge para hacerse hueco en el sector de la defensa nacional e internacional.
Boeing Black es un teléfono multifunción. Sus fabricantes lo han presentado ante el regulador de telecomunicaciones de Estados Unidos como un sistema pensado para proteger la seguridad de los usuarios. De hecho, según han asegurado, el smartphone se ha ideado para distribuirlo entre los organismos gubernamentales del sector de la defensa y las empresas a las que subcontratan.
Teléfono bloqueado si cae en manos ajenas
¿Cómo funciona Boeing Black? El teléfono utiliza el sistema operativo de Android pero a su vez dispone de un equipo que ha sido diseñado estratégicamente para que se autodestruya. De esta manera, se garantiza que nadie más que el dueño del teléfono pueda leer los datos del mismo.
En caso de que alguien intente forzar el sistema de Boeing Black, éste activará una característica similar a la autodestrucción que volverá inservible el aparato. Esto es, si cae en manos ajenas, no se podrá acceder a los archivos y documentos que se hayan guardado en el dispositivo.
De momento se sabe que el teléfono que ha creado la compañía aeronáutica Boeing dispondrá de la versión 4.0 de Android y utilizará un procesador de doble núcleo a 1.2 GHz. Además, el terminal incluirá una ranura para meter una tarjeta SD y otra de conectividad USB para descargar los datos en el ordenador.
Los fabricantes del smartphone no han desvelado aún cuándo saldrá al mercado ni si estará disponible para el público en general. Lo único que es seguro es que este teléfono se ofrecerá principalmente al sector gubernamental y a las grandes empresas de datos.