La revolución tecnológica de los últimos años ha dado como fruto, a día de hoy, dos tipos de televisores. Por un lado, los televisores de plasma; por otro, los de LED, cada uno de ellos con sus ventajas y, en cierto sentido, también con sus deficiencias, sobre todo cuando son comparados. Pues bien, LG ha desarrollado una tecnología que aúna lo mejor de cada una de estas opciones: el PLED. Este tipo de televisores se presentan este año como una de las novedades de más relieve y son exclusividad de la compañía LG.
La pregunta inevitable es: ¿Qué ofrece una televisión PLED que no ofrezcan los otros televisores? La clave está en sus seis millones de pixeles en una pantalla ultra Slim, los cuales trabajan de forma independiente y regulan su brillo por separado, lo que proporciona un ajuste de la imagen a la más alta calidad. Las imágenes alcanzan una nitidez espléndida, la reproducción de los colores es sorprendentemente óptima.
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Estos televisores de LG tienen 600 HZ de refresco, lo que significa que cada segundo lanzan 600 imágenes, eliminando así de forma definitiva tanto las estelas como cualquier efecto borroso. Por muy rápido que sea el movimiento de una imagen, ya no dejará ningún tipo de ráfaga, lo cual proporcionará una experiencia extraordinaria a los aficionados, por ejemplo, al fútbol o a la Fórmula 1, y también, por supuesto, a los cinéfilos más exigentes.
Incorporan además el sistema SmartTV, con una navegación libre flash 10.0, que ofrece una variedad enorme de contenidos. Así mismo, para mayor disfrute de SmartTV, estos televisores disponen del mando interactivo Magic Control, por lo que la experiencia audiovisual que se ofrece al consumidor en los televisores PLED es del máximo nivel.