Basándose en la tecnología de las Google Glass, investigadores del Instituto de Tecnología de Georgia, Estados Unidos, han diseñado un chaleco que permite que perro y dueño se comuniquen. Es cierto que algunas personas tienen un don especial para entender a los perros sin necesidad de ninguna ayuda tecnológica, pero este nuevo dispositivo puede resultar muy útil para realizar ciertos trabajos.
Los perros, además de fieles amigos y una inmejorable compañía, realizan ciertos trabajos de mucha utilidad, como guiar a las personas ciegas o buscar explosivos, drogas o a personas desaparecidas. El innovador chaleco permitirá hacer estas tareas de forma más eficiente.
El proyecto se llama sistema FIDO (Facilitating Interactions for Dogs with Occupations) y consiste en un chaleco que permitirá, a los perros entrenados para ello, «hablar» con sus dueños. En algunas situaciones, el perro y el dueño o el cuidador no se pueden ver, bien por obstáculos, bien por lejanía. ¿Cómo avisar entonces de que algo ha ocurrido?
El chaleco adaptable al cuerpo del perro está diseñado para ser llevado por éste, que podrá morder o llevar a cabo otra acción en caso de que necesite transmitir alguna información. Los investigadores han trabajado, para desarrollar el proyecto, con una adiestradora de perros profesional llamada Barbara Currier.
Comunicación a distancia
El arnés, que es una suerte de chaleco para perros, está equipado con sensores. Cuando el perro acciona alguno de esos sensores, el mensaje llega al cuidador a través de un dispositivo Glass o un auricular. Las primeras pruebas permitían al perro morder, dar un tirón o colocar su boca cerca del sensor para activarlo. Tres perros aprendieron rápidamente a diferenciar y activar los sensores. Si se mejoran los sensores y se enseña a los perros, éstos podrían informar de que necesitan salir a dar una vuelta, de que tienen hambre o que un ladrón ha entrado en casa, por ejemplo.