Los aficionados y seguidores de las antiguas máquinas arcade, que en los años 80 fueron tan exitosas, ya pueden revivir la experiencia de juego de aquellos años pero en la época actual porque vuelven a estar a la venta, gracias a la iniciativa de la empresa Bricoarcade, lanzada por un grupo de emprendedores españoles, que han vuelto a lanzar al mercado estas máquinas que, ahora, también pueden ser adquiridas por particulares.
De momento, la empresa comercializa sólo dos tipos de máquinas que se caracterizan por tener el diseño característico de las Bar Top para apoyarse sobre una mesa o bien para acoplarse con un soporte inferior que puede aumentar su altura en 90 centímetros, consiguiendo que el mueble tenga un aspecto como el de las máquinas arcade que se instalaban en los bares, salas de juego o en centros comerciales.
La máquina -cuyo mueble integra un monitor de 18,5 pulgadas y sistema eléctrico aparte de contar con un panel de control para uno o dos jugadores-, dispone de una apertura frontal para poder incorporar otros dispositivos.
De esta manera, los usuarios que dispongan de un ordenador pueden acoplarlo e introducir un emulador, ROM y Front-ed para disfrutar de una experiencia de juego como en los años ochenta. La máquina también cuenta con accesos en la parte superior del mueble para la iluminación y el audio, mientras que en la parte trasera es dónde se puede introducir un ordenador, placa de juego o dispositivo compatible.
La ventaja es que, además de poder conseguir estas máquinas con las que se podía jugar a juegos como el Tetris o el Pacman, las personas interesadas pueden personalizarlas con un diseño propio o bien con motivos que sean emblemáticos para el jugador o que añoren, aparte de poder optar por personajes que les atraigan, entre otras posibilidades.
Una personalización que puede realizarse en determinadas zonas de la máquina como es el caso de la marquesina, aunque igualmente se puede llevar a cabo en otras áreas como el panel de control de la máquina, pudiendo elegir entre botones y mandos de diferentes colores.
Las máquinas se lanzan a un precio que oscila entre los 350 euros para el modelo más básico y los 850 euros para el modelo completo con pie hasta el suelo, controles Arcade, ordenador interno y sistema eléctrico. No obstante, estos precios pueden variar en función de la personalización que se elija.