¡Cómo pasa el tiempo! Parece que fue ayer. Pero ya han pasado casi veinte años desde que se subió la primera fotografía a la entonces incipiente red de redes. La foto en cuestión se tomó el 18 de julio de 1992. Poco después, fue subida a la nueva red de comunicaciones por científicos del CERN (Organización Europea para la Investigación Nuclear). En esta institución, Tim Berners-Lee estaba desarrollando la World Wide Web. Para probar la nueva tecnología, pensó en compartir, en su caso, consigo mismo y algún otro miembro de su equipo o de otras instituciones que participaban en el desarrollo del proyecto, una imagen de un grupo de música: Les Horribles Cernettes.
Les Horribles Cernettes estaba compuesto por trabajadoras y novias de miembros del propio CERN, que habían decidido montar el grupo como afición no profesional. Hacían actuaciones en fiestas. Sus canciones eran parodias en las que la física era un tema recurrente. Antes de uno de sus conciertos, Silvano de Gennaro, otro trabajador del CERN, en este caso, un desarrollador de Tecnologías de la Información, tomó la fotografía que se convertiría en un hito de y en internet.
El creador de la World Wide Web, Tim Berners-Lee, fue quien tuvo la idea de subir la foto a la nueva red. Sus colegas se extrañaron, ya que, hasta ese momento, sólo se había subido texto a la red de redes y sólo la utilizaban físicos. El bueno de Tim dijo: «será divertido». ¿Se puede considerar el momento en que internet pasó de ser una herramienta puramente científica a un fenómeno social? ¿Fue el principio de las redes sociales?
Veinte años después, se comprobado que Berners-Lee tenía razón (como en muchas otras cosas): fue divertido. Pero también divulgativo, creativo y rentable. Hace algunas semanas, Facebook pagó 1.000 millones de dólares por Instagram, la aplicación para tratar y compartir fotos por las redes sociales. Las imágenes son, quizá, lo más importante de la red en estos momentos.
La imagen de Les Horribles Cernettes, simulando una portada de disco, fue subida en formato gif desde un Mac a color, utilizando la primera versión del programa Photoshop de Adobe.