No todo el mundo piensa que Instagram es una aplicación con un gran mérito. En una encuesta realizada en Facebook a 2.000 personas, por ejemplo, los encuestados clasificaron las fotos Instagram que les llegaban a través de sus feeds de Facebook como molestas. Solo las fotos de los bebés de todo el mundo superaban a las fotos de esta curiosa aplicación.
Para la mayoría de los encuestados el problema es que ven la aplicación como un «truco publicitario», produciendo «innecesarios efectos fotográficos.» Profesionales de la fotografía, como Olivier Du Tré también tiene sus críticas, diciendo que los usuarios de la app son perezosos en la aplicación de los filtros a las fotos. Además considera que es una especie de práctica artística sin imaginación y con defectos.
Por ejemplo, las diferentes áreas de una foto requieren diferentes grados de iluminación o ajustes de color pero Instagram aplica los mismos ajustes a cada foto. En un principio, cuando la aplicación se estrenó, los puristas se quejaron de que las fotografías que se realizaban con ella perdían la originalidad en un momento. Ahora, Instagram permite guardar las fotos originales no filtradas, de forma predeterminada, lo que elimina ese problema.
Instagram está pensado para aquellos aficionados que no están interesados en los originales, o en una realidad exactamente a copiar. Para muchos, la aplicación es la mejor manera de corregir errores, ya que con un par de filtros somos capaces de enmascarar aquellas cosas en las que no nos gusta que la gente repare. Está claro que Instagram ha revolucionado el mundo de la fotografía, sacándolo del clasicismo ¿tú qué crees?