La transferencia de archivos de un ordenador a otro, a veces, puede ser una tarea difícil. Existen un par de soluciones disponibles. La manera más popular para realizar una transferencia de archivos es mediante la grabación de un CD de datos. Necesitarás una grabadora de CD y un par de CDs en blanco.
Otra de las soluciones por la que puedes optar es la de intentar poner en red los ordenadores. Esto, te permitirá transferir los archivos directamente desde un sistema a otro. Para configurar una red, necesitarás una tarjeta de red o un adaptador de red en cada equipo. Si tienes Windows XP en tu ordenador debería ser capaz de detectar la red de otro ordenador, a excepción de Windows 2000 y Windows 95.
Si simplemente tienes que pasar algunos archivos, es mejor que busques otra solución más rápida y eficaz, como por ejemplo una unidad flash. Estos pequeños discos duros externos son cada día más populares. Sus tamaños han ido evolucionando al igual que su capacidad de almacenamiento. Podemos encontrar en el mercado pendrives pequeñísimos capaces de almacenar 60GB de datos.
Normalmente es tos dispositivos plug and play se conectan a un puerto USB del PC. En tu pantalla aparecerá la información de que se ha instalado una unidad extraíble. También puedes ver todos los datos de la misma introduciéndote en Mi PC (Equipo). Si tienes un ordenador demasiado antiguo, puede que tengas que instalarle los controladores para los puertos USB o un software para que el dispositivo sea reconocido. Una vez grabados los archivos, introdúcelo en el puerto USB del PC receptor pero, antes revísalo con el antivirus por si hubiera algún archivo corrupto.