Prácticamente todo el mundo se pelea por conseguir el ‘smartphone’ más puntero. Sin embargo, otras personas no necesitan tanta tecnología, un teléfono móvil es una dispositivo de comunicación para realizar llamadas telefónicas desde cualquier parte del mundo y con eso es suficiente, no necesitamos nada más.
Pues bien, el holandés John Doe está buscando la simplicidad en la telefonía móvil y ha fundado una empresa a la que ha puesto su nombre (John’s) y ha lanzado un terminal que publicita como el más simple del mundo. Lo cierto es que es un teléfono con las mismas funciones que una línea fija.
Se trata de un teléfono móvil libre, con un teclado numérico que incluye dos teclas, ‘Hello’ (para llamar) y ‘Bye’ (para colgar), y una pequeña pantalla en el borde superior. Los únicos lujos que incluye es un ‘manos libres’, el cargador USB y el libro de instrucciones correspondiente. Lo podemos adquirir en blanco, negro, marrón, rosa, verde y dorado. Otra ventaja es que la batería de litio dura hasta 3 semanas, gracias a su escasez de opciones.
Lo más curioso es que también dispone de una agenda para anotar los números de nuestros contactos pero está fabricada en papel como toda la vida y va guardada en una pequeña caja en la parte trasera del teléfono. El terminal cuesta 70 euros, excepto en color dorado brillante, que asciende a 100 euros.