Imagínate que vas a una tienda y te encuentras con el ordenador más rápido del mundo esperándote. Seguro que te lo llevarías de inmediato pero, ¿cómo es este ordenador en realidad? La tecnología informática es todavía relativamente nueva y el hardware y software que utilizamos son todavía muy primitivos. De hecho, hay una máquina infinitamente más poderosa que llevamos encima todos los días: nuestro cerebro.
Ahora imagina que tu ordenador puede trabajar igual que tu cerebro. Los ordenadores cuánticos son equipos que funcionan como cerebros, utilizando átomos y las partículas sub-atómicas para procesar información. En lugar de funcionar de forma lineal al igual que los ordenadores que conocemos hoy en día, los ordenadores cuánticos realizan ramificaciones para conseguir conexiones y patrones en lugar de simplemente el procesamiento de datos.
El ordenador procesa la información en bits. Los bits son el componente más básico del mundo de los datos. Los datos de un ordenador cuántico se procesan en qubits, básicamente «bits cuánticos«. Al igual que los bits, los qubits también pueden ser un 0 o un 1, pero también pueden ser ambas cosas a la vez.
Esto amplía las capacidades de procesamiento hasta el infinito, y significa que el ordenador cuántico podría procesar la información con todos los valores posibles de los parámetros de entrada. La llegada de los ordenadores cuánticos abre un gran abanico de posibilidades en el campo de la informática para todos. La información es procesada de manera mucho más rápida, se realizan cálculos increíblemente complejos de manera fácil y las bases de datos enormes se pueden buscar tan fácilmente como un índice del libro. ¿No quieres uno?