Existen dos tipos de velocidades: la velocidad de subida y la velocidad de descarga. Si tienes una conexión de acceso telefónico, estos dos tipos deben ser los mismos. Con los módems ADSL o por cable sin embargo, probablemente sean diferentes, la velocidad de descarga suele ser más rápida. Esto se debe a que tuu proveedor de servicios Internet (ISP) vende el servicio con dos velocidades diferentes.
Las velocidades de Internet son a menudo expresadas por diferentes programas que utilizan términos diferentes. Los navegadores y los programas de transferencia de archivos usan a menudo los kilobytes por segundo, abreviado «XX KB / seg». El módem de acceso telefónico y los proveedores de ADSL, utilizan el kilobits por segundo. Dado que se necesitan 8 bits para formar un byte, hay que dividir la tasa de kilobits para obtener la tarifa equivalente a kilobytes.
Despeés de los datos técnicos, vamos al grano. La mejor manera de comprobar tu velocidad es acudiendo a un sitio Web que te ofrezca esta herramienta. Si realizas una búsqueda, como por ejemplo «verificación velocidad Internet » en un motor de búsqueda, puedes encontrar muchos sitios que te ofrecen gratuitamente este servicio. Una vez que hayas elegido el sitio, sigue las instrucciones.
Lo normal, es que te el software te pida que cierres todos los programas que se estén ejecutando. No realices descarga de otros archivos o utilices el navegador durante la prueba de velocidad. Intenta realizar esta prueba en horas punta y en horas con menos tráfico. Algunas de estas páginas te ofrecerán consejos para cambiar la configuración del sistema y así para mejorar la velocidad.